Llegado desde León con 16 años, encontró en Magaluf libertad, trabajo y comunidad. En cuatro décadas ha forjado una sólida trayectoria en ocio nocturno y restauración, contribuyendo a la regeneración turística de la zona. Su compromiso con Calvià lo vincula profundamente al territorio, que representa para él estabilidad, seguridad y el hogar donde ha construido su vida.